Desde el 14 de enero de 2014 se llevan adelante esa metodología en la provincia patagónica y la experiencia es alentadora desde todo punto de vista.

Alfredo Elosu, vocal del Tribunal Superior de Justicia neuquino, explicó los alcances y ventajas de esta modalidad durante el primer “Taller sobre Juicio por Jurados –análisis profundizado de prácticas del nuevo sistema-”, realizado en conjunto por el Poder Judicial de  la provincia de Neuquén y la Embajada de Estados Unidos en el Centro de Congresos y Convenciones en Villa La Angostura.

-¿Cuáles son los objetivos del juicio por jurados?

-Esencialmente, se busca la democratización de la Justicia, de las decisiones judiciales, así como la participación ciudadana en la toma de decisiones trascendentales como lo es la administración de Justicia. Tiene la gran ventaja de la legitimación de las decisiones judiciales.

-¿Cómo evalúa el proyecto de Reforma del Código Procesal impulsado desde el Poder Ejecutivo Nacional?

-Sobre la reforma que se está llevando adelante en Nación no podemos hacer otra cosa que compartirla, porque los lineamientos son los mismos, el objetivo que se busca es el mismo y los resultados que se obtuvieron a nivel provincial son muy buenos como para tener las mejores expectativas.

Según una encuesta mencionada por Elosu, “el 90 por ciento de los jurados consultados considera como muy positiva la implementación del juicio por jurados en la provincia de Neuquén”.

Para el funcionario judicial, una reforma procesal penal no se limita a un cambio de leyes, sino que implica un cambio de mentalidad, ya que se trata de “un trabajo arduo y cotidiano, del que deben participar todos los operadores judiciales”.

Las jornadas del taller estuvieron a cargo de las académicas y especialistas norteamericanas Shari Diamond y Valerie Hans, que a partir de un convenio de colaboración entre el Poder Judicial de Neuquén y el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), estudiaron la experiencia de los juicios por jurados populares desarrollados en la provincia. La reforma cambió el modo de investigar los delitos y de juzgar a los  acusados de cometerlos.  Cada vez que se juzga un delito contra las personas, la integridad sexual o cualquier otro acto que haya provocado la muerte o lesiones gravísimas, si el fiscal solicita una pena de prisión superior a los 15 años, interviene un jurado popular compuesto por 12 miembros. Neuquén ha sido  la primera provincia del país en implementar este sistema en forma pura, ya que todo el jurado lo integrarán ciudadanos.

El jurado se pronuncia sobre si el hecho que se juzga efectivamente existió, y sobre si el acusado es culpable o no. Para declarar culpable al imputado, deben reunirse al menos ocho votos. Luego, un juez profesional define qué pena le corresponde. Si la cifra de votos es inferior a ocho, el acusado no puede ser declarado culpable. Los integrantes de los jurados populares que intervienen en los juicios por jurados son elegidos mediante sorteo público. Los juicios son orales y públicos.