Programa de Calidad


Tras el trabajo con el Programa de Calidad del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, los centros de detención optimizaron sus tiempos en la materia.



En el Museo del Servicio Penitenciario Federal, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se presentaron los avances en materia de calidad para los ingresos de visitas a los complejos que integran el Servicio Penitenciario Federal.

En el tránsito a obtener la certificación internacional IRAM de las normas ISO 9001, los directores de los servicios penitenciarios provinciales y los jefes del área de Visita compartieron los avances alcanzados con la asistencia del Programa de Calidad, del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.

Patrick Haar
Sandra Dosch explica las claves de alcanzar la certificación

La cartera que dirige Germán Garavano da su asistencia en los distintos procesos para alcanzar una prestación de servicios con foco en el ciudadano que va a visitar a una persona privada de su libertad en cualquier parte del país.

En líneas generales, los cambios implementados por el Sistema de Gestión de Calidad lograron un acercamiento al público con un servicio orientado específicamente a las demandas de los usuarios en el acceso a los penales. El Programa de Calidad ya avanzó en mejoras en los complejos carcelarios en el Norte, Centro, Sur y área Metropolitana de Buenos Aires.

Al encuentro acudieron por parte de la cartera de justicia nacional, el subsecretario de Justicia y Política Criminal, Juan José Benitez; la titular del Programa de Calidad, Sandra Dosh; y el jefe de gabinete de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios y Relaciones con el Poder Judicial y la Comunidad Académica, Facundo Bargallo, entre otros funcionarios. Por el Servicio Penitenciario Federal el anfitrión fue el director nacional, Emiliano Blanco.

Los representantes de las distintas unidades carcelarias expresaron mejoras en los tiempos de atención en los ingresos de familiares y las correcciones que se llevaron a cabo en la fase de auditoría interna, al tiempo que enumeraron fortalezas y debilidades edilicias de cada institución.

Sobre el trabajo relaizado, Dosch declaró: “Son impresionantes los avances que han alcanzado en tan poco tiempo en cada una de las unidades penitenciarias, cómo han trabajado sobre las encuestas de satisfacción del usuario y las propuestas que han autodetectado”.

Dosch enfatizó que fueron esas mejoras las que “posibilitaron agilizar el ingreso de las visitas en casi todas las unidades, con una reducción de entre el 30y el 50 por ciento de los tiempos

También señaló que se han logrado reducir en igual porcentaje las quejas de los usuarios, o directamente eliminarlas. Asimismo, recalcó que todas las unidades penitenciarias del país aprobaron la instancia de la auditoría interna y trabajan en la preparación de los aspectos técnicos con vistas a la auditoría externa que será realizada por IRAM, como ente certificante, en el mes de agosto.

A su turno, Benitez destacó que un programa de calidad como el que se está aplicando permite construir un sistema carcelario más pacífico, con menores niveles de conflictividad.

El subsecretario afirmó que la labor del Programa de Calidad del Ministerio permite replantear el trabajo que desempeñan los responsables de las áreas de Visitas, ya que “es una labor fundamental no sólo para la seguridad de cada establecimiento, sino también para la de las personas que están detenidas”.

Para Benitez, con una optimización del ingreso de las visitas se logra mejorar el fin último del encierro carcelario que es que al recuperar la libertad puedan reinsertarse en la sociedad, y destacó que son los propios funcionarios del Sistema Penitenciario Federal quienes “producen mejoras en el servicio y eso es lo desafiante: trabajar en los defectos que podría haber y corregirlos con los estándares de seguridad adecuados”.

Patrick Haar
Una de las mejoras consiste en reducir los tiempos de espera

En ese mismo sentido, el jefe penitenciario Blanco sostuvo que “cuando nos planteábamos reducir los tiempos de visita, sobre todo en los grandes complejos, nos parecía bastante difícil, sobre todo cuando gran parte de la solución tiene que ver con recursos materiales que hoy no tenemos, pero gracias a la labor de todos ya tenemos buenos resultados en un plazo corto”.

Y destacó: “Sobre todo, los cambios introducidos mejoran el desempeño de los internos. Muchos conflictos que hemos tenido son por cómo valoran el trato a sus familiares y conocidos, más que el que reciben ellos mismos, por lo cual estamos trabajando en un cambio de lógica”, sentenció.